Estando en la Luna
Estando en la Luna
Había una vez un chico llamado Aegan que vivía en una ciudad muy poblada y conocida de California, Beverly Hills.
Aegan era un niño encantador y sociable que nunca se estaba quieto, siempre quería salir a jugar con sus amigos y primos e imaginaban que estaban viviendo en la Luna, se entretenían tanto en la Luna que cuando volvían todos a casa ya eran pasadas las ocho de la tarde.
Llegó la Navidad, y cómo de costumbre se fue a Texas a celebrarlo con su familia. Cuando volvió sus padres le comentaron que sus primos se fueron de viaje y que no volverían de aquí a muchos años. Él quedó devastado, y siempre que iba al parque o algún lugar ya no jugaba, porque no era lo mismo. Los echaba tanto de menos que era incapaz de estar con otras personas que no fueran ellos, porque sentía que los estaba traicionando.
Las vacaciones terminaron, volvió a clase, y como de costumbre no quiso hablar ni jugar con nadie, pero a medida que el curso avanzaba los trabajos en grupo iban aumentando, cada vez tenía que relacionarse más, le costó mucho, pero lo consiguió e hicieron un grupo de amigos. Se pasaban el día en la biblioteca haciendo deberes, sin embargo siempre los terminaban echando por molestar.
Aegan era feliz, se sentía feliz, probablemente ya no pueda ver a sus primos, pero la Luna siempre estará allí para ellos.
Mariama Njie
Comentaris
Publica un comentari a l'entrada